July 3, 2025
Poder: hacer que algo ocurra, con o sin permiso.
Ejemplo: Un matón en el colegio puede obligar a todos a callarse. Tiene poder, no autoridad.
Autoridad: los demás reconocen tu criterio o liderazgo.
Ejemplo: Un compañero que nunca manda, pero todos escuchan cuando habla. Tiene autoridad sin poder formal.
Autoridad legítima: el grupo o sistema te da el derecho de mandar.
Ejemplo: El profesor tiene autoridad legítima. Puede sancionar, pero también influir por respeto.
Autoridad genera respeto, poder puede generar resentimiento
Ejemplo: En una pareja, uno toma decisiones desde la escucha y claridad: autoridad. Otro impone con gritos: poder.
El que tiene autoridad suele despertar admiración o envidia
Ejemplo: Un amigo que mantiene la calma y pone límites sin ofender suele incomodar a quien no sabe hacerlo.
Efecto espejo: muestra lo que tú no tienes o no puedes sostener
Ejemplo: Alguien que tiene autoridad emocional (seguridad, autocontrol) provoca rechazo en quien solo se impone por agresividad.
Político con poder, sin autoridad: miedo, no respeto
Ejemplo: Un dictador controla el país, pero nadie lo admira. Su poder es frágil si el miedo desaparece.
Político con autoridad pero sin poder: influencia moral, no práctica
Ejemplo: Vaclav Havel antes de ser presidente en Checoslovaquia. No tenía poder, pero su palabra pesaba más que la de los poderosos.
Cuando la autoridad legítima se erosiona, entra el populismo
Ejemplo: Cuando la gente siente que el parlamento no representa sus intereses, aparece un outsider con discurso fuerte pero sin legitimidad institucional.
Jefe con poder formal pero sin autoridad: liderazgo por miedo
Ejemplo: El típico manager que nadie respeta, pero todos obedecen para no meterse en líos.
Empleado con autoridad informal: liderazgo real sin cargo
Ejemplo: El senior dev que no es team lead, pero todos le preguntan antes de decidir algo importante.
Cultura buena: autoridad y poder van juntos. Cultura tóxica: el que grita más, manda
Ejemplo: En una empresa sana, el mejor preparado lidera. En una empresa rota, manda el que está más cerca del CEO.